Sasil Sánchez y Mateo Peraza comentaron la obra de la periodista Katia Rejón
Luego de que el Sol se ocultara entre nubes grises y alteradas debido a un potencial ciclón que se acerca a la península, comenzó una noche fresca, de esas que pocas veces se disfrutan en la tierra hirviente, un escenario perfecto para hablar de lo cambiante y vivo que es el estado de Yucatán, a través de una obra escrita por alguien enamorada de esta región: Tierra de Sol, de Katia Rejón.
La periodista fue acompañada en la velada de la presentación de su obra impresa por Sasil Sánchez y Mateo Peraza, quienes diseccionaron el libro y compartieron la experiencia que les dejó haber leído seis crónicas sobre seis diferentes municipios del estado.
El evento comenzó con Katia al micrófono compartiendo un fragmento de su obra, uno en el que destacó su sentir hacia Yucatán, recordando que Yucatán no es sólo Mérida y hablando sobre la resistencia y sobre su experiencia de conocer la perspectiva de otras personas en otros municipios.
“Este libro está hecho con vientos de huracán, con el olor a caca de cerdo de las carreteras de Yucatán, ustedes ya saben cuáles, pero sobre todo está hecho con la experiencia de vida y el conocimiento de muchísimas personas”, dijo la autora, quien también es colaboradora de La Jornada Maya.
Katia habló sobre Darwin, un guardaparques de Dzilam de Bravo -uno de los seis municipios que mapea el libro- y resaltó lo maravilloso que es que se exprese de animales y plantas como si fueran sus conocidos.
“‘Esos vatos’, decía para hablar sobre los pepinos de mar; ‘la banda’, decía refiriéndose a las fragatas; ‘esos weyes’ para hablar de los jaguares o ‘están morros’ para decir que los manglares eran jóvenes”, compartió para invitar a leer Un lugar bravo de tesoros y piratas, el capítulo dedicado a Dzilam de Bravo.
Al respecto, Sasil destacó que la lectura permite cuestionar cómo ha sido la narrativa y la sensibilidad que ofrecen las crónicas escritas en la región.
“Hasta podrían catalogarse como heroicas, sin embargo, andar y llevar en la mochila al Sol de Yucatán es algo que probablemente te podría hacer desertar, si no sabes cómo es andar con él y mucho menos lo que eso implica entonces yo sé que pusiste mucho empeño para lograr esto”, manifestó Sasil, quien es editora de K’iintsil, la sección en maya de este rotativo.
“Tierra de Sol no es una oferta turística, es una sensible y bella plática que presenta la riqueza del dialecto de Darwin… La conceptualidad de Tierra de Sol permite romper las definiciones occidentales, porque así como a Soco le choca que digan que hacer teatro como es recuperar las tradiciones a mí me choca pensar que todo está escrito y es incuestionable, que lo maya está limitado a las versiones académicas de quienes dicen cómo deberíamos ser, porque el despojo también es hacernos extranjeros en nuestra propia tierra, sin embargo, creo que aquí se plasma la voz de especialistas activos en el territorio que se sustentan de la experiencia y de la práctica de teorías que apenas están llegando a la oficialidad como la escuela mexicana”, amplió Sasil.
Por otro lado, el cronista yucateco Mateo Peraza reconoció a Tierra de Sol como un recorrido que narra diversas aristas de este complejo estado y celebró la riqueza en la crónica escrita por Katia.
“Este libro es una piedra contra el agua quieta, crea ondas que se extienden en el espíritu y el cerebro, o mejor en palabras de Katia: como una raíz que se extiende hacia muchas direcciones seamos, pues y cito ‘como un relevo o una hoja seca que se descompone para liberar nutrientes y recomenzar un nuevo ciclo’”, dijo el joven escritor.
La velada que se llevó a cabo en Local de Chuburná también contó con la exposición de ilustraciones de Neto Medina, artista que acompañó la obra de Katia con algunas piezas.
“Si quieren entender el Yucatán de hoy, deben leer Tierra de Sol, pero creo que también es un trabajo que nos ayuda a entendernos a nosotros los yucatecos y, más aún, hablarnos a nosotros mismos como sólo nosotros sabemos”, compartió Neto a través de un mensaje enviado desde España, lugar en el que actualmente reside.
La versión impresa de Tierra de Sol corrió a cuenta de Capulín Taller Editorial y actualmente se encuentra disponible en las librerías Sempere, Wewé Club, Nopalkraft, Buena Vibra Forever, y Dante.